sábado, 5 de mayo de 2007


Si me caigo puedo llegar a volar

Y en esa frase se encierra toda la sabiduría de la tierra

Es difícil manejar los sentimientos,

Aparecen ahì como una especie de presencia

Una presencia que explota dentro del pecho de uno

Suele explotar dentro del cràneo

Mejor dicho, explota en el pecho

Pero el detonante està en el cràneo

Y del pecho el efecto baja a las tripas

Y duelen las tripas

Es un puñal en las tripas

He visto hombres apuñalados

He sido apuñalado

He visto los detonantes màs estùpidos

Explotando bombas nucleares dentro del pecho

Destruyendo tripas

Mil alfileres clavados en las tripas

Y no hay nada màs penoso que un hombre llorando

Y no hay nada màs penoso que la pena del amor

Por que cuando no hay amor hay muerte

Y no hay nada màs penoso que la muerte cuando està vestida de rosa

Yo siento la tristeza que hay en tu pecho

Siento los puñales que te acorralan

Pero esos puñales tambièn pueden llegar a cortarme

Y voy a entrar en la escena disfrazado de mi mismo

Voy a gritar: `fuera de este cràneo estùpidos sin elegancia`

Voy a sacar mi revolver de palabras y no voy a dejar titere con cabeza

tengo buena punterìa, y voy a adueñarme del lugar

Fue lo que siempre he hecho,

espantar a los fantasmas

para que no entren màs

y nos dejen ver el sol

brillando sobre los àrboles rojos

del costado de la ruta


Estoy ordenando mis dientes,

Me cuesta mantenerlos ordenados y limpios

Sobre todo por una sutil separciòn que trato que mantengan entre sì

La separaciòn de las paletas representa mi fortuna

Y no tengo fortuna, ni soy afortunado

Pero tengo las paletas separadas

Y en estos tiempos de mala suerte eso es demasiado

Pero encuentro que uno de mis molares està un poco

Dirìa `it`s tired` como achacado por el tiempo,

Este molar, que pertenece a la parte izquierda de mi mandíbula

Aunque suelo ponerlo en la derecha por equivocación

Tiene un brillo excepcional, es como una estrella dentro de mi boca

Pero no mastica bièn, es como la diva de mi dentadura

Un diente rebelde y brillante, lleva la marca

Es cain entre un montòn de abeles que se dedican a masticar

Es el diente filosofal en el que suelo escribir las combinaciones de las cajas fuertes

Ese diente, sobre todas las cosas ha soportado innumerables ganchos al hìgado

Por que es el ùnico que tiene un higado

No como un premolar que tengo con calculos en los riñones

Y otro que creo que es asmàtico, este tiene un hìgado

Creo que no hay nada màs humano que un hìgado.

Pero en este ordenar y pulir y reacomodar

Todo para mantener mis paletas separadas

Me suelo confundir a veces

y termino incrustando en mi boca un lp de Pescado Rabioso

que està siempre sobre la pileta de la cocina.

Esto provoca que la comida llegue a mi estòmago màs relajada

Y por ende me relaja el estòmago

Que tengo entendido està algo distanciado con mi hìgado

El cual al enterarse de la situación dice:

Amen dico vobis quia unus vestrum me traditurus est!!!

Entonces ella me grita:

`no quiero que mires otra vez dentro de mis ojos`

Voy a tratar pero me es imposible

Ayer cuando me fui a acostar la cama estaba desarmada

Pero no desarmada

Sino desordenada

Las frasadas abajo y las sàbanas arriba

Pero a mi no me pican las frasadas

Pero si me dan frìo

Y en esa habitación el aire estaba al mìnimo

Yo necesitaba helar mi sangre un rato

Mi cerebro reptil estaba inundado de Bach y Ravel

Y los huesos, mis huesos, tenìan calor

Mi carne frìo,

esto quiere decir que la cama desordenada

me desordenò las temperaturas

esa frasada infame como desafiándome

dejè caer el hacha que traia en la mano del medio

y me dije:

`vois estàs demasiado relajado para esta vida`

Siempre me hablo en castellano y me contesto en latìn:

Beati hommo quibus bibere vivere est

Abro una botella de whisky y prendo un puro

Me recuesto sobre la frasada

La mùsica para de sonar,

Hecho un trago

Mañana es miércoles

Hoy es un buèn dìa para vivir.


Cuando abra el cajòn de mis costillas

Voy a sacar un paquete de corcel

lo voy a comer con zanahorias y huevo

La camarera va a traer la cabeza de un ornitorrinco

aceite de oliva, aceto balsàmico

En su boca un globo terraqueo del tamaño de una pelota de tenìs

Y le dirè:

Por favor, retire usted los platos sucios que ha dejado el anterior comenzal

Y ella me dirà:

Usted siempre deja propina pero no quiere decir que sea su sirvienta

Usted no es mi sirvienta, es mi esclava

Yo no le dejo propinas,dejo limosnas

Ella me sonreirà con la sonrisa màs perfecta que una camarera puede tener

Y yo sacarè mi celular rojo sangre y llamarè a la policía:

`señores aquì no hay nada que ver`

Y el telefònista de quedarà sorprendido

Mientras saboreo mi ornitorrinco, mis zanahorias y mi huevo sin sal.


Lo bueno son las vias del tren, esas vias muertas, abandonadas, por donde ya no pasa ningún tren, o quizàs pase un tren de carga una vez por semana. Me gusta mirarlas y ver como se pierden en el horizonte, me gusta sentir la potencia del tren que pasò por allì, los rieles, las maderas, hacer equilibrio sobre un solo riel, ser un equilibrista del riel, y saltar entre los durmientes de quebracho y las piedras que permiten que la via se asiente, me gusta pasar por zonas inundadas y ver que lo ùnico que sobreviviò fue la via del tren se que estoy on the way cuando camino por la via, y me gusta caminar por la via a las 3 o 4 de la madrugada y pasar por arriba de zanjas de agua que podrìan matarlo a uno, y sentir el ruido de la noche, los grillos y tener siempre en la mente el `puede llegar a venir`, eso es bueno, y ver pasar un tren de noche, y pasar por una via que no tiene barreras, no hay nada màs placentero que pasar por una via sin barreras, ese mirar para los costados, y ver la locomotora a lo lejos, y cuanto màs lejos estè mejor, por que uno la puede esperar, y pasa lento, esos trenes de carga son muy lentos y pesados, es como una marcha de elefantes mecànicos y cuasi cuadrados. Ayer pensaba, ayer por la tarde mientras miraba los campos pasar como una película: quisiera manejar un tren, un dìa al menos, un tren de carga que recorra el campo, y meterme en esos tùneles sucios y abandonados, y andar despacio por muchas vìas, en una intersección repleta de vìas, y piedras y durmientes y galpones oxidados. No creo que haya una imagen muerta màs viva que la de un tren abandonado, y no se por que los trenes tienen esa fuerza y ese magnetismo, pero bue, el frio del riel es tan bello que calma todas las fiebres y no hablo de suicidio, creo que eso es un acto de blasfemia hacia tan bella imagen como es el tren y sus vias, que los suicidas utilicen los edificios nuevos y altos, que no utilicen tampoco edificios viejos y bellos, que usen armas nuevas, no bañeras ni gilletes, que usen pastillas, o un tiro bièn dirigido, pero que no contamienen mis vìas, no contaminen mis trenes, mis edificios y ni siquiera las bañeras en las cuales me acuesto a fumar , tomar whisky y pensar todas estas cosas.


Me encuentro como el torero que vuelve al ruedo, y puede ver como al toro le sangra el lomo de a poco, no digo que puedo comerme crudo al toro y luego escupir su mèdula como un carozo, pero si que puedo desafiarlo, patiarle el culo y salir corriendo a algún escondite que quede contramano. Esa satisfacción del volver al ruedo es tan grande, esa adrenalina, poder disfrutar cada movimiento, cada segundo, mientras huelo sutilmente ese olor a extraño postre que tengo en los pantalones. Los viajes te dejan un olor extraño, pero màs extraño es que luego de haberme bañado y cambiado de ropa todavía sienta el olor a la hierba del mediodìa en mi. Esos son perfumes que a uno le quedan adentro, ¿quièn dice que los aviones vuelan realmente?, es todo un truco de magia de dios, que està con dos hilitos moviendo el avioncete.

Si hay un nombre que me gusta pronunciar y sentir que se pronuncie es `Ludwig Van Beethoven´, es decir, es un nombre con una resonancia tan exquisita Ludwig Van, a ver, repeti avec mua `Ludwig Van`, aaaaaaa, es placentero ese nombre, pero me gustan tambièn nombres como RImbaud o Baudelaire, esa sonoridad al pronunciarlos, es algo sumamente placentero Arthur Rimbaud, Charles Baudelaire, Paul Verlaine, Jack Kerouac, creo que para ser un buèn artista hay que tener un nombre exquisito, ese es un requisito fundamental, Carlos Lopez jamàs va a trascender como artista, quizás sea un buèn jugador de fútbol, pero jamàs un gran artista, en fìn, las cosas son tan asì, pero tan asì, que pareciese que no tienen vuelta, y yo lamento tanto pero tanto que todavía no se alla inventado la teletransportaciòn, que mejor busco una buena imagen para adjuntarle a este texto